jueves, noviembre 10, 2005

Combatiendo las egiptopatrañas (III de V)

Algunos estipulan que Egipto fue gobernado primero por dioses, luego semidioses y finalmente por los hombres. Para ello se basan en escritos como los de Manetón, similar en cuanto a trascendencia al Beroso babilónico, y que cuenta una historia cuyos cimientos son similares. Los dioses han sido vistos como extraterrestres o atlantes, los semidioses como híbridos humanos-alienígenas y los hombres, “de después del diluvio”, como los faraones conocidos. Pero es el mismo Manetón el que nos dice que fue un tal Sufis, que reinó durante 63 años, el que levantó la Gran Pirámide “que Heródoto dice que fue construida por Keops”. Heródoto, que habló de oídas sobre Egipto, no tiene demasiado crédito y ha sido usado por los sensacionalistas para desacreditar la autoría de Keops. Pero ya es grave que Manetón, en su lista que se perdió y de la cual sólo nos ha llegado cierta información gracias a las citas a él insertas en otras obras como las de Eusebio y Julio Africano, sitúe el siguiente orden alrededor de Sufis (el constructor de la Gran Pirámide):

Soris - 29 años
Sufis I – 63 años
Sufis II – 66 años
Menkeres – 63 años

Dados los nombres de los demás de la lista y su orden, Menkheres es evidentemente Menkaure (Micerinos). Antes de él, Sufis II (Kefrén). Y antes de éste, a su vez, Sufis I. Con lo que el Sufis constructor de la pirámide "que Heródoto dice que fue construida por Keops", es ¡¡el mismo Keops!!. Y Soris, Snefru, su padre, autor de la Pirámide Roja, y al menos otras dos inacabadas. Hablare de él después.

Lo curioso de todo esto es que a Manetón se le cita para lo que interesa, pero se obvia cuando da datos relevantes.

Para rebatir otras falsas teorías hay que entrar en un campo más técnico. ¿Pudo el hombre aunar esfuerzos suficientes como para construir algo tan impresionantes como las pirámides?. O ¿por qué las primeras pirámides fueron grandes y solemnes y luego se registró un alarmante descenso en la tecnología empleada, así como en el tamaño de las mismas?. ¿Es que intentaban tan sólo copiar lo que ya existía miles de años antes?.

LA PIRÁMIDE DE SNOFRU
La que vemos en la imagen es la Pirámide Roja de Snefru, padre de Keops. Construyó al menos 3; la primera la dejó inacabada, en la segunda el ángulo tuvo que ser modificado y no se fiaba de que se derrumbase, y en la tercera, ésta, puso todo su empeño para que saliese bien. ecordemos que Snefru o Sneferu fue el padre de Keops. Esta Pirámide roja tiene unas dimensiones que se acercan mucho a las de su hijo: 220m x 104m, siendo la de Keops 230m x 146m. Junto a ella se encuentran los restos de las instalaciones donde se labraba y cortaba la roca (imagen adjunta). En ella se han encontrado todo tipo de herramientas, desde cinceles de cobre a martillos de madera, pasando por fragmentos de granito que se usaban para el pulido. Algunas rocas de gran tamaño conservan inscripciones que revelan datos relevantes sobre la Pirámide Roja.

En ésta se dice algo así como “en el tercer mes de la estación de las inundaciones…”, lo que demuestra que se trabajaba en ella durante todo el año. En otra se habla del “año 14 del reinado” de Snefru. Reuniendo la información de los bloques hoy sabemos que se tardó 17 años en construir la Pirámide Roja. Al parecer había unas 25.000 personas trabajando en ello; en las canteras, en el transporte, en las instalaciones de cortado y preparado, en las rampas que se usaban para subir los bloques, y otros dedicados a la alimentación del personal.


Igualmente, hay una ciudad aún no excavada aquí, en la imagen que se acompaña. Lugar en el cual residía gente muy especial, como nobles y familiares del rey, que tenían como misión toda la parafernalia religiosa como ofrendas, ruegos a los dioses, etc…

Ya la cámara funeraria de Zoser, de la III Dinastía, estaba decorada a imagen y semejanza de su palacio real, con objeto de que su Ka (espíritu) se encontrase en la otra vida como en su palacio real, corte incluida.

Con lo que es evidente que era su autor, y el destinatario final de la misma. Ello nos obliga a aceptar dos cosas: una que eran tumbas, algo que tocaremos después más en profundidad, y otras que el hombre sí tenía capacidad suficiente para construir grandes pirámides.

Pero hay más pruebas de que las pirámides no son obra de ninguna civilización con tecnología de ensueño, tipo atlante. En la de Keops, algunas cámaras de descarga (situadas sobre la cámara funeraria) realizadas en granito se terminaron desquebrajando durante la construcción. Es por ello que Kefrén situó ésta en su pirámide justo a ras de suelo. No quería que su momia fuese aplastada. Por otra parte, en la de Keops encontramos varios tipos de construcción que evidencian que cambiaron de planes conforme avanzaban. Se usaron vigas de granito y bóvedas en saledizo.

Para el transporte de las piedras (también se tocará más en profundidad en adelante), hay algunas consideraciones más. Con respecto al templo de Karnak se narra la historia del intento de transporte de casi 100 toneladas por medio de 70 hombres. Habían mojado el suelo con limo del Nilo y algunos aceites. Los hombres terminaban cayendo al suelo porque resbalaban. Y al final se llegó a una conclusión de que cada hombre podía arrastrar él sólo 1 tonelada por ese suelo.

Kefrén corrigió algunos defectos de Keops. Ello nos demuestra que hubo una linealidad y un proceso de aprendizaje-error. Micerinos, por su parte, optó por algo más modesto para evitar ciertos problemas.

Al caer la IV Dinastía y empezar la V, vemos que las pirámides son del tipo Micerinos, es decir, menor tamaño. A cambio, se construyen muchos templos. No hay retroceso pues, sino una mejor gestión de los recursos. ¿Qué sería de Egipto sin sus templos?.

LAS TUMBAS
Hay muchas pruebas de que las pirámides sí eran tumbas reales. Muchos se han empeñado en repetir a sol y sombra, que no se ha encontrado ni una sola prueba y que es extraño que las momias no estuviesen en su interior. Es totalmente FALSO. Veamos algunas de las evidencias.

-Famosos Textos de las Pirámides, grabados en las paredes de las pirámides de reyes y reinas entre la V y la VIII dinastías. En ellos se dice que éstas son tumbas. Los más antiguos son los de Unis, último faraón de la V Dinastía.. También se dice lo mismo en las pirámides de Teti, Meryra-Pepy (Pepi I), Merenra-Antyemsaf (Merenra), Neferkara-Pepy (Pepi II) y Kakara Ibi (Aba). Algunos de los pasajes son repeticiones de los que aparecían en estelas y mastabas de las dinastías I y II.

-Obreros del califa Al-Mamun (820-827 dC). Abren un sarcófago en la Gran Pirámide. Encuentran lo que describieron como “un cadáver con armadura dorada, decorada con toda clase de piedras preciosas”. ¿La momia de Keops?. Quizá no sea más que una leyenda, pero si no lo es, ahí está Keops y la demostración de que las pirámides eran tumbas. Y si no lo eran, ¿por qué dar crédito a otras leyendas que nos hablan de un saber milenario, de antes del diluvio, etc…?. Es como el asunto de Manetón; se los usa a conveniencia. En cualquier caso los saqueadores hicieron un destructivo trabajo.

-1881, se encuentra la momia real más completa, la de Menrera, hijo y sucesor de Pepi I. Se conserva en el Museo de El Cairo, número de referencia 5250.

-Finales del siglo XIX, Jacques de Morgan. En la Pirámide Negra encuentra la momia de Hor I, de la XIII Dinastía.

-1945, encuentran parte de la momia del rey Isesi, de la V Dinastía, es decir, una después de la de Keops. Estaba desperdigada por la cámara funeraria de su propia pirámide. Las vísceras, debidamente resguardadas en los vasos correspondientes.

-1970, Jean-Phillippe Lauer, cámara funeraria de Pepi I, de la VI Dinastía. Antes se habló de la de su hijo Menrera. Un cofre de granito contiene las vísceras del rey. ¿Para qué entonces era la cámara funeraria?.

Además se han encontrado las de: Zoser (Dinastía III, antes de Keops), Snefru y Micerinos. En resumen, momias desde la III a la VI Dinastía, y de la XI y la XIII. Las otras ya aparecerán , si tenemos suerte.

La momia de Micerinos, o mejor dicho parte de ella, la encontró el famoso Howard Vyse. Su sarcófago se perdió en el naufragio de su transporte, pero la momia en sí se conserva en el British Museum. En Qasr el-Aini (El Cairo) están por su parte las de Zoser y Snefru.

Ahora pasaremos a desmitificar todo lo rebuznado por aquellos que creen imposible el transporte de todas las piedras necesarias para una pirámide como la de Keops.

EL TRANSPORTE DE LAS PIEDRAS
En la tumba del príncipe Dyehutihotep (XI Dinastía), aparece representado el transporte de una estatua de calcita de 6,8 metros de altura, de peso aproximado 60 toneladas, en un trayecto de 50 km por sólo 172 hombres.

De otros textos se desprende que 4500 hombres podían transportar 80 bloques gigantescos durante 90 km en 14 días (2 semanas).

Igualmente, 2000 hombres con 10 estatuas de 2,5 metros de altura, peso aproximado 200 toneladas el conjunto; mismo recorrido.

Trazando una media (sólo válida para cálculos), digamos que en 2 semanas 10.000 personas podían formar 10000/172= 58 grupos de 172 personas capaces de transportar 60 toneladas X 58 grupos = 3.500 toneladas cada más o menos 7 días (si para 90 km=14 días, para 50…), es decir, 3.500 x 4 semanas = 14.000 toneladas cada 28 días = 14.000 toneladas por mes.

Desarrollando más ese cálculo, en un año se podían transportar 14.000 toneladas X 12 meses = 168.000 toneladas. Y en 25 años (17 se tardó en la de Snefru, la Roja), 168.000 x 25 = 4.200.000 toneladas.

Teniendo en cuenta que el peso medio de un bloque de la pirámide es de 2,5 toneladas, tenemos en conjunto 1.680.000 bloques. Hay evidencias en estelas del uso de barcos, animales e incluso de la construcción de nuevos canales para traerlas de las canteras.

Sin embargo, la Gran Pirámide tiene aproximadamente 2,5 millones de bloques. Parece que nos quedamos cortos… o no. La explicación es sencilla. La mayoría de los bloques fueron extraídos de la msma meseta de Guiza. Es decir, que de 7 días de transporte, nada de nada. Como mucho un par de horas. Esta capacidad responde a todas las dudas que puedan plantearse sobre el anterior sistema propuesto. El transporte por mano humana es posible.

Otra incógnita más es la relacionada con el tipo de taladros usados por los egipcios.

LOS TALADROS EGIPCIOS
Extracto de la web http://www.egiptomania.com/, muy recomendable por el excelente trabajo realizado. Encontré mucha información, usada a lo largo de este documento, y bien ilustrada con imágenes y fotografías. Visítela.

“La herramienta (taladro) era tan común y utilizada desde las primeras dinastías que hasta palabras como arte (hemet), artesanía, artesanos y muchas otras, estaban constituidas por el signo de la barrena (berbiquí o taladro). Algunas de estas formas están representadas en la escritura jeroglífica […] aunque también los había, por ejemplo, para agujerear cuentas de un collar de perlas, para hacer fuego e incluso vasos de piedra u otras aplicaciones. Con pequeños taladros se utilizaban una especie de arcos para hacerlos girar a gran velocidad de forma cómoda.

Los taladros de cobre eran impregnados del agente abrasivo cuando estaban al rojo y tanto este como la forma y tamaño finales, dependían del destino que se les diera. Para taladrar también se mojaban en aceites o grasas, lo cual facilitaba enormemente el trabajo.

¿Cómo puede penetrar el taladro tan rápido en una roca tan dura, a veces hasta 2 mm por vuelta ? . La respuesta es simple, no es cierto que penetraran hasta 2 mm por vuelta: en las micrografías se muestra que las marcas no son totalmente paralelas, que empiezan y terminan de forma aleatoria, etc., es decir, que el tamaño de los surcos depende sólo del tamaño de grano del abrasivo (normalmente polvo de cuarcita) y cuando unos se rompían o desgastaban, entraban en acción otros (de ahí que los surcos tengan principio y fin, sean desiguales en tamaño y no sean realmente paralelos siempre). Lo que las penetraba era esencialmente el cuarzo contenido en cualquiera de las rocas trituradas empleadas como abrasivo, que es bastante duro pero no tanto como para no desgastarse mucho antes de lo que lo haría el diamante. También se demostró en los ensayos que esas marcas aumentan cuando se usan aceites o grasas a la vez, es decir, los taladros se lubricaban también. Sin lubricación las marcas son mucho más pequeñas, por tanto, más rozamiento trituraba el abrasivo y el agujero quedaba muy suave pero destruía más rápidamente el taladro.

La propia roca también dejaba marcas en el taladro con el uso y de ahí los surcos que tiene el que se encuentra en el Museo Petrie. Por todo esto, la vida de un taladro era limitada y seguramente se volvería a fundir para usar el cobre en otras cosas, éste es el motivo de que apenas tengamos restos pero sí infinidad de representaciones.

La propia roca también dejaba marcas en el taladro con el uso y de ahí los surcos que tiene el que se encuentra en el Museo Petrie. Por todo esto, la vida de un taladro era limitada y seguramente se volvería a fundir para usar el cobre en otras cosas, éste es el motivo de que apenas tengamos restos pero sí infinidad de representaciones.

Como primera conclusión, hay que entender que: "rocas duras como granito, diorita o esquisto" no son tan duras como algunos desinformados "investigadores" suelen decir. Pero claro, la verdad es lo último que interesa a ese tipo de personas, pues vende más escribir sobre "tecnologías muy desarrolladas" para poder trabajar rocas "tan duras" (según ellos).

Rocas del tipo diorita-granodiorita-granito, junto con calizas como el mármol y otras, han sido elegidas desde la antigüedad para la realización de esculturas, por su belleza y por su facilidad para "saltar en pedazos". La fragilidad de estas rocas puede ser una ventaja para un buen artista, que con maestría las modela sin que se desmoronen y un cincel de cobre es una herramienta perfectamente útil para este fin. El cincel tiene como misión principal el comunicar el impacto a la roca, que producido en el lugar oportuno (sólo con las vibraciones no controladas se podría destruir por completo la roca más dura), hace que se desprendan los trozos que el escultor desea eliminar. Poco importa que el cincel sea más blando, es hasta necesario si se quiere alisar una superficie eliminando los salientes con cuidado y sin rayarla. Aunque éste fuera de hierro seguiría siendo más blando que muchas rocas; su misión no es penetrarlas y es más, lo necesario es un material que aguante bien los impactos y los comunique lo mejor posible, de lo contrario el que saltaría en pedazos sería el cincel. Es decir, un cincel hecho íntegramente de diamante, sería totalmente inútil para este fin.

En resumen: lo sorprendente no es que los cinceles fueran de cobre (en las primeras dinastías, más tarde bronce e hierro), lo realmente sorprendente sería que no lo fueran”

Y más:

“La diorita no está un punto de dureza por debajo del diamante, ni siquiera en la anticuada escala de Mohs. Por otra parte, ¿de qué "diorita" estamos hablando?: por ejemplo las leucodioritas, contienen menos de un 10% de cuarzo, a pesar de guardar gran parecido con las tonalitas y granodioritas. Es decir, existen dioritas relativamente blandas y otras más duras y ricas en cuarzo. Al igual que los granitos, son rocas rocas volcánicas (magmáticas) y guardan parecido con estos, encontrándose siempre su dureza por debajo del siete en la escala de Mohs (recordemos que en esta escala el siete es el cuarzo).Sí es cierto que algunas dioritas, por su estructura y composición, tienen gran dureza, pero de ahí a ponerlas tan cerca de la del diamante natural (hay diamantes artificiales más duros que el natural), hay un abismo... más que un abismo lo que hay es un burdo engaño.

Actualmente se manejan distintas escalas de dureza y cada una tiene su propio ensayo y definición (las de Brinell, Knoop y sobretodo las de Vicker y Rockwell), pero la más famosa es precisamente la peor y la que encima suele tratarse como única: la escala de Mohs compara 10 minerales de dureza creciente; pone al talco en el 1 y al diamante en el 10, dando la falsa impresión de que éste es sólo diez veces más duro que el talco, cuando en realidad lo sería más de 36 veces (y más, dependiendo del tipo de diamante) si tomamos el "punto" como la diferencia en dureza entre talco y yeso (1 y 2 en la escala de Mohs). La escala de Mohs fue modificada por Woodell, para corregir este engaño al que se nos puede inducir y que muchos aprovechan para crear "misterios" donde no los hay. Según la escala modificada de Mohs, los granitos y dioritas son 6 veces más blandos que el diamante, es decir, están aproximadamente de 30 a 40 puntos por debajo del mismo en esta escala, que además no son "puntos" equiparables a los de las otras ya mencionadas”

El trabajo de http://www.egiptomania.com/ lo deja bastante claro.

VUELTA A GIZEH
Los trabajos de investigación del prestigioso egiptólogo Zahi Hawass han demostrado la existencia de la ciudad de los constructores de las pirámides de Gizeh, es decir la de Keops, Kefrén y Micerinos.

El Dr. Mark Lehner, del Instituto Oriental de Chicago, excavó las panaderías que sirvieron para alimentar a los obreros. Hawass, por su parte, hizo lo propio con los cementerios. Eran reclutados por la administración. Por las inscripciones insertas el las cámaras de descarga de la Gran Pirámide, por ejemplo, sabemos ya que se distribuyeron en dos equipos. Cada uno de ellos, a su vez, constaba de cinco grupos cada uno. En total había unos 30.000 trabajadores en las épocas de máximos, que era cuando se reclutaba al personal de entre los “parados” debido a la estación de las inundaciones del Nilo, es decir, en Septiembre. Hay hornos de pan, talleres de sandalias, cerámicas, tejidos, etc… También un más que significativo jeroglífico nos habla de un cargo denominado Inspector de la Cara Oeste de la Pirámide. Igualmente hay una estatua que representa al Inspector de Construcción de Tumbas, e incluso datos sobre el hombre que la esculpió.

En el cementerio se puso de relieve el desgaste sufrido por los trabajadores, con cerca de un millar de esqueletos estudiados. Huesos y costillas rotas, amputaciones, deformaciones de la columna vertebral, etc… eran el pan de cada día. Uno de los esqueletos había sufrido la amputación de un pie, pero sobrevivió otros 14 años. Entre 30 y 35 era la edad media de vida. Salían al amanecer y volvían al atardecer; incluían en su dieta el pez gato y el pez synodontis, presentes en el Nilo. Asimismo hay restos de ovejas y cabras, y de cereales como el trigo, el centeno y la cebada, así como almacenes para éstos, para vino, aceite y cerveza. Igualmente, otros destinados a racionar los alimentos que eran pan, pescado, carne, hortalizas, etc…, distribuirlos entre los trabajadores.

También había talleres de herramientas, como martillos. Instalaciones de producción de tintes ocre y rojo, los mismos usados en el interior de la Gran Pirámide para escribir el nombre de Jufu, entre otras cosas, y que fueron encontrados por Vyse.

Es la prueba fehaciente de que las pirámides son obra humana, y además, con mucho esfuerzo y organización.

MÁS PRUEBAS
Son infinidad las pruebas que demuestran la autoría humana de las pirámides. Existen multitud de representaciones donde se ve el trabajo de la piedra por parte de los egipcios, con monumentales bloques comparables a los del complejo de Gizeh.

Cuando Zoser construyó su pirámide escalonada en Sakkara fue consciente de una realidad insalvable. La cantera de piedra caliza, abundante en todo Egipto, no permitían la extracción de grandes bloques.


En la imagen adjunta observamos las líneas de extracción, que denotan el tamaño de los bloques. Keops, sin embargo, pronto fue consciente de que no podía construir su espléndida pirámide con pequeños bloques de piedra como los de las pirámides precedentes. Por ello, tuvo que desplazarse a otro lugar, y el elegido fue Giza. Tampoco el espacio disponible en Sakkara habría permitido la construcción de un gran monumento, por lo que el transporte de bloques desde Giza a Sakkara fue también descartado.



En esta otra imagen apreciamos una cantera de Giza, donde existía la posibilidad de extraer bloques de tamaño muy superior. Se pueden apreciar bloques de considerables dimensiones que quedaron por extraer. De aquí surgió la mayor parte de la materia prima que permitió tan colosal conjunto en Giza. Estas fotografías son siempre obviadas por los cantamañanas de turno de la egiptología y la piramidología.

Existe una interesante y más que probable teoría que afirma que las pirámides de Giza, Sakkara y Abu Sir tenían como elemento en común su alineación con el templo solar de Heliópolis. Tanto Kafre (Kefrén) como Menkaure (Micerinos) incorporaron a su nombre el culto a Re (Ra). Heliópolis era la sede central de adoración al dios sol (éste era el “ojo de Ra”).

La denominada “Roca de la Ciudadala” se interponía en la línea de visión entre Abu Sir y el templo solar de Heliópolis. No así sucedía con Giza y Abu Roash, que tenían visión directa del mismo. Por ello, en Abu Sir se habría construido otro templo solar.

Así, el mismísimo Jufu (Keops) disponía en su pirámide de un Barco Solar, signo milenario de la cultura egipcia. El sol, como ojo de Ra, ascendía por la bóveda celeste cada día y cruzaba el inframundo por la noche a bordo de uno de ellos.

En la imagen adjunta, el barco solar de Keops, encontrado en su pirámide, y que tuvo que ser reconstruido. La madera procedía del Líbano, y era de cedro. Esta materia prima fue muy apreciada por todas las culturas de Oriente Medio y África a lo largo de la historia, desde sumerios a acadios, babilonios, egipcios, etc… Esa un signo de calidad y distinción. Era “la crema” de las maderas.

El fraude de Majestic-12

El fraude de los documentos del Majestic-12 es indiscutible tan sólo para los que se muestran escépticos. Curiosamente, aquellos que los investigan “a fondo” y sacan conclusiones a favor de su veracidad no tardan en publicar bestsellers o ganarse un nombre notorio dentro del campo de la ufología.

He pasado las últimas semanas devorando gran parte de la información disponible acerca de los documentos en liza. Como los estudios sobre la tipografía, nomenclatura y estilo empleados en los documentos que nos ocupan están ya más que mascados decidí que en lo que a mí concernía no iba a pronunciar mis humildes opiniones basándome en tales aspectos. Siempre he dicho que este tipo de análisis aleja a los “ciudadanos de a pie” que se muestran crédulos o a lo sumo dubitativos. Que si la letra tipo pica, que si la morfología del trazo superior izquierdo de la firma de Truman… demasiado aburrido. En cualquier caso creo que deberían consultarse los excelentes trabajos resumidos publicados, por ejemplo, por La Alternativa Racional en su número 8, relativa al Majestic-12, o también la poca información disponible de la FOIA al respecto. Estas últimas siglas evocan “Freedom of Information Act”, el Acta de Libre Información y su web nos remite a los archivos nacionales de los Estados Unidos. Allí encontraremos bastantes alusiones a Roswell y el Maj-12, debido a la gran cantidad de consultas que reciben al respecto, así como algunos razonamientos a mi juicio impecables, sobre la no veracidad de los documentos en cuestión. Éstos, por otra parte, pueden ser descargados en parte en esta web; y digo en parte, porque para acceder a todo el material habrá que rascarse el bolsillo debidamente. Como se dice en algunas películas, “esto es América, amigo”. Pero ya que “ésto es España”, yo personalmente aconsejo el uso de redes P2P. Al fin y al cabo, esos documentos son delictivos con la ley norteamericana en la mano, y no hay derechos sobre ellos (y si los hubiera, también recomendaría el P2P J)

En lo relativo al siguiente mini análisis personal, me he centrado más en la información que proveen los documentos, que en la forma en que lo hace.

El primer documento que vio la luz fue el “Briefing Document: Operation Majestic-12”, un resumen redactado para el recién elegido presidente Eisenhower. Este documento, fechado el 18 de Noviembre de 1.952, presenta una información muy vaga al respecto, la cual se vería enormemente complementada con la aparición de nuevos papeles. Y he aquí el problema; todos sabemos lo que pasa con los rumores que nacen en peluquerías o tiendas de barrio, que se agrandan y agrandan hasta llegar al punto de que la información final resultante se contradice con la que surgió inicialmente.

Según el resumen supuestamente entregado a Eisenhower, todos los métodos para determinar el método de propulsión de los alienígenas accidentados en Socorro y Corona fueron infructuosos. Se asumía la gran probabilidad de que hubiese sido destruido en el accidente. Sin embargo, existe otro informe que salió a la luz más tarde pero que es cronológicamente anterior, llamado “Majestic-12 Annual Report”, que aunque carente de fecha (grave error en un documento oficial y ultrasecreto), sí contiene las de algunos documentos integrantes del mismo. Por ello, se estima que su redacción se dio sin ningún género de dudas, durante el verano de 1.952, es decir, varios meses antes del realizado para Eisenhower. Y el problema es el tremendo contraste de informaciones existente entre ambos. En el Annual Report se habla de un reactor atómico basado en la tecnología fisión-fusión, que generaría un sistema de propulsión magnética para los viajes por la atmósfera. Para el espacio, sin embargo, la aeronave alienígena utilizaría un sistema basado en plasma.

No entiendo cómo un informe puede presentar tantas dudas y tan poca información, y otro anterior ser tan explícito y además contradecirlo. Pero ahí no queda la cosa, puesto que ya cinco años antes se habrían realizado dos informes más a cargo del General Jefe del Mando Logístico del Aire, Nathan Twining, fechados el 16 de Julio de 1.947 y el 19 de Septiembre del mismo (este último denominado ““White Hot Report Assessment of recovered lenticular aerodyne objects”), y en ellos se describe con una precisión asombrosa el sistema de generación de energía del aparato alienígena. Se habla de un reactor atómico y de la presencia de deuterio, agua pesada, plutonio pulverizado, torio, uranio-235 y otra serie de elementos que a alguien con una mínima formación rápidamente le suenan a tecnología relativa a las bombas termonucleares.

Sin embargo, que esto no nos llame a engaño. No hubo tecnología alienígena aplicada a la terrestre, no existió esa ingeniería inversa. Estos eventos habrían tenido lugar a partir de 1.947, pero la posibilidad de usar reacciones de fisión nuclear (con uranio o plutonio) para producir fusión de hidrógeno (con deuterio y tritio), ya era conocida por los integrantes del Proyecto Manhattan, que comenzó hacia 1.942. La primera bomba termonuclear basada en este sistema se probó con éxito el 1 de Noviembre de 1.952, antes incluso del “Briefing Document: Operation Majestic-12” entregado supuestamente a Eisenhower. Se llamó Mike, tenía un poder de 10,5 megatones y estaba encuadrada dentro del proyecto Ivy.

Resulta imposible concebir que la administración norteamericana desconociese las posibilidades de la tecnología termonuclear cuando ya era materia teorizada diez años antes. Merece la pena citar otro documento Majestic: un informe redactado por la CIA y fechado el 30 de Octubre de 1.950, donde se habla de esta tecnología “alienígena” que al parecer nunca existió para uno de los documentos del Maj-12.

Considero que se abren ante nuestros ojos tres posibilidades: la primera que esos documentos del Maj-12 son completamente falsos, la segunda que sólo algunos de ellos lo son, y la tercera que estamos completamente locos y aún sabiendo que son burdos fraudes creemos en ellos.

Redirigiendo la vista de nuevo hacia el “Briefing Document: Operation Majestic-12”, encuentro otra contradicción importante. Al tratar el asunto de la posible procedencia de los alienígenas, se estipula que Marte sería una posibilidad aunque Donald Menzel consideraba más probable como origen otro sistema solar. Sin embargo, la carrera de la exploración espacial que comenzó en 1.958 envió 19 sondas a la luna, entre rusos y norteamericanos, antes de probar suerte con Marte. Y fueron los primeros, además, los que se atrevieron a tal empresa. Tengamos en cuenta que una información de tal calibre como es la procedencia de los visitantes, no parecía tener importancia alguna para los Estados Unidos, que ni siquiera consideró que los soviéticos pudiesen contactar con ellos en el espacio y tomar así ventaja jerárquica en nuestro planeta. Las primeras sondas con destino el planeta rojo fueron las Marsnik 1 y 2. Luego, los rusos mandaron rumbo a la Luna más de 20 sondas Sputnik, 8 con el principio nominal Luna- y alguna más. USA, por su parte, echó mano de 9 Ranger y 7 Surveyor para tal empresa. Asimismo, se lanzaron hacia Venus (¿alguien ve un interés especial en Marte?) 16 sondas Venera, alguna Zond y otras tantas Cosmos, por parte de la URSS. Hasta 1.962 los Estados Unidos no se decidieron a visitar el planeta rojo y pusieron en marcha la serie Mariner, de las que se fabricaron 10, y las dos Viking. Diez años tardaron…

También, en el “Briefing Document: Operation Majestic-12” se afirma con rotundidad que el origen terrestre, de alguna nación de la tierra, de esas misteriosas aeronaves estaba completamente descartado. Sin embargo, en otro documento Maj-12 denominado “Nature of Survey” fechado en 1.955, es decir, tres años después del primero, se da cuenta del trabajo de seguimiento de los agentes de inteligencia sobre los sistemas de cohetería y propulsión desarrollados por la URSS, con objeto de comprobar si este país era el responsable de tan fascinante tecnología. Es otra contradicción, y muy importante.

Seguimos con el documento principal, piedra angular del Majestic-12. Según éste, en el rancho de Marc Brazel se encontraron cuatro cuerpos extraterrestres. Sin emabrgo, en el “Majestic 12 Annual Report” se habla de cinco y además en la zona de Socorro, y no de Corona donde estaba ubicado el rancho del granjero. No he encontrado, aunque quizá haya cometido algún error, ninguna alusión a 9 cuerpos (5+4), y no debería haberlas ya que se habla de que la aeronave del rancho de Brazel chocó sufrió un primer impacto aquí para luego seguir sobrevolando la zona a duras penas y terminar cayendo en Socorro. Poco antes, los alienígenas habrían intentado escapar en una cápsula cilíndrica que resultaría gravemente dañada. Este detalle se menciona en ambos documentos, pero sucede que en uno se da como lugar del suceso el Landing Zone-1 (Corona, el rancho) y otro el Landing Zone-2 (Socorro). Alguien se confundió al redactar esos documentos.

Se habla también del estado de descomposición de los cuerpos debido al tiempo transcurrido entre el hallazgo y el accidente, que se estima debió suceder una semana antes, es decir en torno al 1 de Julio. Ésta es la versión difundida, y dice que Brazel se encontró con los restos el día 2. Sin embargo, en el mencionado “Majestic 12 Annual Repor”t de 1.952, (insisto en recordar que está fechado algunos meses antes del que nos ocupa), afirma que uno de los globos Mogul llegó a detectar la explosión del reactor del ovni el 4 de Julio. ¿Cuál de los dos se equivoca?.

Pasemos a otros documentos, en concreto al reporte de Twining fechado el 16 de Julio de 1.947, un par de semanas después del supuesto accidente. En él, se describe el aparato tras un examen inicial y se afirma que no se habían encontrado ni ventanas ni sistemas de visualización que indicasen que el objeto fuese pilotado in situ, por lo que se lanza la hipótesis de un control remoto del mismo. ¿Y qué hacían los alienígenas dentro entonces?. ¿Ya nadie recuerda el cilindro de escape y los cinco cuerpos?. Bueno, los cuatro, o los nueve. Sin embargo, en el “White Hot Report Assessment of recovered lenticular aerodyne objects” obra también del propio Twining en Septiembre del mismo año, se menciona un sistema de visualización televisiva y, además, un control por medio de una extraña simbiosis mental entre piloto y aparato, que dispondría de un complejo sistema de inteligencia artificial. Nuevamente, en otro documento, el reporte de la CIA de Octubre de 1.950, se descarta el control remoto del aparato pero no se menciona el más mínimo detalle sobre este innovador sistema de control simbiótico, algo que resulta sumamente sospechoso. Igualmente, en el “White Hot Report Assessment of recovered lenticular aerodyne objects” se describe la cabina de pilotaje, con la situación y ángulo de los asientos, pero resulta extraño que en el documento previo de Julio, Twining hablase de control remoto. ¿Cómo pudo no ver esa cabina?.

Más. Se habla de que los aparatos no habrían sido diseñados para volar en el interior del planeta, debido a cuestiones aerodinámicas y a la ausencia de paneles que mostrasen los datos necesarios como altitud, etc… Sin embargo, no es concebible que Oppeheimer, Von Karman y Von Braun (¿los escribí bien?) lanzasen una hipótesis basada en el Efecto Coanda y el subsiguiente uso del “oxígeno” de la atmósfera, para un aparato que debía estar destinado a los vuelos espaciales. Igualmente, aunque se hace esta última consideración, se estima en otro documento que el ingenio aprovecharía las líneas de campo magnético de la tierra, lo que hace recurrente la pregunta de ¿y qué sucedería cuando se alejase de ella?. Al fin y al cabo, era un aparato “espacial”.

Resulta sospechoso que en el “Majestic 12 Annual Report” se termine incluso por acudir al argumento de supuestas interferencias extraterrestres durante las operaciones de bombardeo de la 2ª Guerra Mundial, el robo de armas nucleares a bordo de los bombarderos en misiones rutinarias sobre suelo aliado, la desaparición de batallones durante algunos combates históricos y al control y vigilancia a los que los extraterrestres habrían sometido a las plantas de producción de plutonio de los Estados Unidos. Más parece que trate de convencer que de informar.

Lo mismo sucede con el informe de Twining de Septiembre de 1.947, el cual establece una serie de condiciones relativas a la posibilidad de vida en otros sistemas solares e incluso acude a la idea de la existencia de un aún desconocido orden superior de las cosas en el cosmos, cuando simplemente debió dedicarse de forma explícita al título que era “White Hot Report Assessment of recovered lenticular aerodyne objects”, es decir, el análisis de los aparatos de forma lenticular, recuperados.

Terminando. Considero que los instigadores de este fraude trataron de crear una historia y, luego, la fueron complementando poco a poco. Quizá ello esté motivado por la diferente autoría de los distintos documentos, pero mis sospechas están encaminadas en otra dirección tras haber leído las andanzas de Klass con Shandera. Se puede deducir, en el artículo de LAR nº8, cómo este último afirmaba falsamente haber verificado las informaciones. Nadie excepto el autor de un fraude, sólo o en compañía, mentiría en estas cuestiones poniendo en peligro su ya maltrecha credibilidad.

lunes, noviembre 07, 2005

Rectificar es de sabios

Hace ya algunas semanas surgió un malentendido en el canal #misteriosdetodoacien del IRC-Hispano. Conversando con un usuario sobre la archiconocida polémica en torno al capítulo de Planeta Encantado “Mirlo Rojo”, entró a colación la postura al respecto de José Antonio y Marisol Roldán. En aquella tertulia mostré mi postura crítica hacia el primero de los dos por lo que definí como un “apoyo” del mismo a Benítez durante la emisión de un programa de radio de Aluz.

Poco después tuve la oportunidad de charlar con José Antonio Roldán al respecto, el cual me aseguró que su actitud siempre había sido justamente la contraria. Me pidió que escuchase de nuevo aquel programa y que entonces sacase conclusiones, algo que le aseguré que haría. Entretanto, pude visitar el link que el propio José Antonio me dio y en el que se podía comprobar la postura crítica de Aluz al respecto de Mirlo Rojo.

Aunque le pedí disculpas por adelantado, basándome en la lógica de que no tenía sentido que hubiese hablado a favor de Benítez y su documental a la vez que escribía un artículo enormemente crítico, no me quedé tranquilo debido al pesar personal que implicaba el haberme equivocado de forma tan abrupta. Como no disponía ya de una copia de aquella emisión, me dispuse a localizarla y me encontré entonces con varios programas que me hicieron ver el error. Y éste se produjo al existir dos debates radiofónicos al respecto, uno en Aluz radio, y otro en Misterios en las Ondas. De modo que tras oír el primero y comprobar que no era la fuente de la cual yo había sacado mis erróneas conclusiones, me dirigí a Ramón Álvarez para solicitarle el archivo correspondiente a la segunda, es decir, Misterios de las Ondas.

Con gran celeridad me respondió y puso el programa en la sección Fonoteca de su web, con lo cual a día de hoy la he descargado y escuchado de nuevo. Desde aquí le doy las gracias nuevamente. No tengo dudas de que fue justamente esa emisión la que generó el malentendido. En ella, actuaban como invitados Marisol y José Antonio Roldán, Luis Alfonso Gámez y el profesor D’arbó, similares a los del segundo programa de Aluz.

En mitad del programa surge un debate en tono amistoso que transcribo a continuación:

Locutor (Ramón Álvarez): Yo me considero un admirador de él, fuertemente
D'arbó: Es tu problema
Locutor: Es un gran escritor
D'arbó: ¿Es un gran escritor?. ¿Ha ganado un Nobel de literatura o... como es eso?
Locutor: No, no, no lo ha ganado
D'arbó: Entonces, ¿cómo sabes que es un gran escritor?
[...]
Locutor: Los lectores lo confirman, Sebastián, ¿no?
D'arbó: Oye... también son lectores los que leen a Arguiñano


Y fue justamente ese retal de conversación el que me hizo equivocarme, ya que en mi volátil memoria guardaba la firme convicción de que tal fragmento pertenecía a la emisión correspondiente a Aluz y no a Misterios en las Ondas. Tomé al locutor Ramón Álvarez por José Antonio Roldán, quizá ayudado por la mala calidad del formato wma, un mal que tenemos que padecer los internautas.

Por lo tanto, como rectificar es de sabios, mis disculpas desde aquí a José Antonio Roldán, el cual no me ha solicitado una rectificación pública. Aún cuando tras mis últimos estudios coincido con Luis Alfonso Gámez (“Marisol y José Antonio Roldán quieren creer. Pero con eso no basta para hacer ciencia y avanzar en el conocimiento del Universo. La existencia de algo hay que demostrarla. La prueba la tiene que presentar quien sostiene que una cosa existe y en 'Buscando misterios', como en todos los demás libros sobre lo paranormal que se han publicado desde que el mundo es mundo, no hay nada sólido a lo que agarrarse, sólo testimonios, ya sean de terceras personas o de los autores”, en Magonia), y con Javier Armentia (“Marisol y José Antonio, bien conocidos también del mundillo pseudocientífico, aunque hábiles nadadores en eso de quedarse siempre en los territorios de enmedio”, en Por la boca muere el pez), lo que no es, no es, por lo que he de hacer un ejercicio de humildad y confesar que me equivoqué.

Obviamente, mi comentario no llegó a más, ni hubiese sido así sin haber revisado el material disponible, ante el cual me habría dado cuenta del error.

Disculpas, por lo tanto, pedidas, a José Antonio Roldán.

domingo, noviembre 06, 2005

Ni extraterrestres ni anunnakis (II de V)

Esta es la segunda de cinco entregas de esta saga. Es preciso recordar que me baso en el libro "El 12º Planeta", y el artículo avanza con una linealidad paralela a la del mismo. Por ello, a veces pudiera parecer que se salta de un tema a otro sin sentido, siendo la causa la distribución por páginas de las tonterías de la mencionada obra.
CONFUNDIENDO AL PROFANO
Los textos sumerios, acadios y babilonios nos muestran a los “anunnaki”, los dioses, como habitantes cuyos hogares se establecían preferiblemente en el inframundo, el hades que derivaría más tarde en el infierno. Al ser dioses ajenos a los judíos, fueron considerados malignos por su teología.

En la página 78 se menciona un retal de un texto que dice:

“Alalu fue derrotado, huyó ante Anu. Descendió a la oscura Tierra. Abajo, a la oscura Tierra fue; en el trono se sentó Anu.”

Sitchin afirma que Alalu tuvo que abandonar su trono “en algún lugar de los cielos”, para recalar en la tierra. En otro libro suyo, “El libro perdido de Enki”, lo interpreta como una huida a bordo de una nave espacial, hasta llegar a nuestro planeta. Sin embargo, vuelve él mismo a contradecirse puesto que en la página 130 se narra el descenso de la diosa Inanna “al mundo inferior”, bajo la tierra, que era dominio de su hermana Ereshkigal y el esposo de ésta Nergal. Queda claro, por tanto, que el lugar donde recaló Alalu fue precisamente el inframundo, un lugar tan terrible que ningún hombre que lo visitase podía volver.

Todo este asunto de inframundo y anunnaki, pues, es el origen del mito del Hades, del Infierno y de toda la parafernalia adjunta. El por qué Alalu huyó a este lugar se explicará en otra entrada, cuando se hable de la distribución del cielo en porciones correspondientes a los diferentes dioses.

Pero hablemos de la tierra de Súmer, de donde manan todos esos misterios.

SUMER
La tierra de Súmer toma su nombre del término con el que lo conocían los acadios: Shumerum. Es así como aparece en el epíteto del gran Sharrukin (Sargón I de Acad): “Rey de Shumerum y Acad”.

En la página 94 Sitchin dice el siguiente disparate:

“La palabra egipcia para ser divino o dios era NTR, que significa "el que vigila". Curiosamente éste es el significado exacto del nombre de Súmer: la tierra de los que vigilan”.

En realidad, el nombre sumerio (y no acadio) de Súmer, que por otra parte no debería pronunciarse así sino “Shumer”, es Ki-en-gi, que dado viene a ser algo así como “Tierra de los señores justos”. Para que dijese algo relativo a “vigilar” debería contener “Igi”, no “Gi”. Sitchin mezcla a otros personajes sumerios, los Igigi o dioses vigilantes (“Igi”=mirar) con Kiengi, que es el nombre de un lugar (“Ki”).

En la página 100 muestra el signo cuneiforme para referirse a “An”, dios supremo sumerio. Equipara su relación con una estrella para establecer su presunto origen estelar. Para los sumerios, los dioses eran las propias estrellas. Así, Enlil era el “Señor del aire” (que no “del espacio aéreo”, que suena más extraterrestremente tecnológico, página 103), y Enki el “Señor de la Tierra”.

En una tierra plana rodeada por una cúpula, los sumerios dividieron el firmamento en 3 franjas. La inferior correspondía a Enki, el Señor de la Tierra, y dado que en determinadas direcciones no había tierra sino agua, su nombre acadio pasó a ser Ea, “casa-agua”, es decir el que tiene su casa en el agua. Sobre él, en posición central y predominante, An o Anu. Y en la parte superior, Enlil, el Señor del Aire. Estas franjas eran conocidas como “caminos”, y cada uno de ellos tenía asignada una ingente cantidad de estrellas, aportadas más tardíamente por los babilónicos. Todo se describe en el texto llamado Mul.Apin (“estrella-arado”).

Dado, por tanto, que los dioses tenían sus estrellas, existía un distintivo que se anteponía ante cualquier nombre escrito de un dios, que era precisamente el de una estrella, o An.

LA BATALLA DE ZU Y SU NAVE ESPACIAL
En las páginas 114 y sucesivas, se narra la batalla del dios Zu. Comienza Sitchin afirmando que el malvado dios quería apropiarse de las “Tablillas de los Destinos”, que no eran otra cosa que cartas estelares de coordenadas o vete tú a saber qué locuras. Al final, en una batalla aérea sin igual misiles incluidos, es derrotado y exiliado.

Los expertos, los de verdad y no los que cita Sitchin cuando necesita darle aires de seriedad a sus delirios, están de acuerdo en que el relato de Zu formó originariamente parte del Enuma Elish. De hecho, este poema no es más que una usurpación de otro mucho anterior sumerio, y en la versión babilónica se suplanta a Enlil por Marduk, dios supremo de esta última cultura. Y esas “Tablillas de los destinos” que quería Zu, también aparecen en el Enuma Elish, que Sitchin afirma no es más que un relato de la creación de nuestro sistema solar, donde se da cuenta además de cómo Nibiru (Marduk), el planeta de los anunnaki, chocó contra Tiamat dando lugar a la Tierra y al cinturón de asteroides. Por lo tanto, si las Tablillas de los destinos eran coordenadas espaciales, ¿para qué demonios las necesitaban los planetas?.Servirían para las naves espaciales, no para los astros: éstos ya tienen sus propias leyes para mantenerse donde deben. Como todo esto era así, Sitchin evita mencionar a Zu en la página 98 cuando habla de Apsu, Tiamat y los otros dioses/planetas.

Después de hacer alarde de su ignorancia en ingeniería hablando de naves con alas y piñones desmontables, alude al arma con el que Ninurta vencería a Zu: el “til”, que por su forma cuneiforme parece una flecha (página 117). ¡Faltaría más, que un signo cuneiforme no se pareciese a una flecha!. Aunque también se parecen, no obstante, a pisadas de pájaros, que fue lo que algunos pensaron que eran cuando fueron descubiertas. Se hacían con cañas de madera sobre barro húmedo, y por lo tanto, el lugar donde más presión de ejercía daba forma a la cuña.

El signo para “flecha” es en realidad “Ti”, siendo Ti.l para “vivir”. Ambos están muy emparentados el uno con el otro, puesto que “Ti” también significa “vida”, y hasta “costilla” (de ahí el relato de la costilla de Adán). En cualquier caso, aunque tanto Ti como Ti.l puedan significar algo relacionado con la vida, Ti.l no tiene nada que ver con flechas. Es “Ti”, y el texto de Zu usa “Ti.l”. Complicado de explicar, pero fácil de comprender. Es la manipulación de Zecharía Sitchin.

En la página 121 el autor hace algo parecido a lo anterior, pero a la inversa. Lía el asunto para establecer que en realidad, Zu era Zu.En o En.Zu (puesto que en sumerio el orden es irrelevante, lo que es cierto en determinadas condiciones), y que En-Zu es como En.Su o Su.En, es decir, Suen, el nombre acadio para el dios Nannar: Sin.

Pero no es lo mismo decir “tomate” a que “te mato”. Los sumerios cuando escribían determinadas palabras usaban indicativos. Por ejemplo, el denominado “dingir” antepuesto al nombre de una divinidad; éste era una estrella, “an”. En medio de cualquier nombre o palabra se leía “an”. Los indicativos no se leían, sólo se escribían. Así, “gish” se usaba para árboles, y “mushen” para pájaros. Y el dios Zu se escribía “An.zu Mushen” (Mushen en superíndice), es decir, “El pájaro Anzu”. Por lo tanto, aunque Sitchin se niegue a aceptarlo Anzu no iba a bordo de un “pájaro” sino que era tal. Un pájaro-dios. Por su parte, Nanna/Nannar/Sin, como queramos llamarlo, estaba bien identificado: la Luna, el dios lunar.

Hasta aquí algunas más de las mentiras de Sitchin. En la próxima entrega, hablaremos de la Torre de Babel y su "nave espacial".